Han pasado ya unos días desde que volvimos de Senegal, con la calma de haber procesado las experiencias y acciones que se han realizado.

Consultas médicas: realmente te das cuenta de las necesidades que hay en un sitio al poder valorar el éxito que tiene una campaña de estas características, en nuestro caso se ha hecho una campaña con cuatro especialidades:

Viendo estos datos, queda claro que se han hecho unas 200 visitas al dia, junto con esto se han repartido unos 2.000€ en medicamentos, hay que recordar que en Senegal la sanidad no es gratuita y aunque no se factura el precio real, hay muchas personas que valoran no acudir al médico para ahorrar un dinero imprescindible para la familia.

No puedo olvidar la ayuda totalmente desinteresada del grupo de personas sanitarias que nos han acompañado, realmente gente joven con ganas de ayudar, con el conocimiento necesario para hacerlo, es muy emocionante ver su implicación y su interés en hacer que las cosas funcionen, me lo han puesto muy fácil y desde la asociación siempre se lo vamos a agradecer.

Un caso a parte ha sido Helena Munné, ella fue a Senegal en el viaje de Otoño 2022 y ha vuelto con nosotros ahora, a parte de empaparse del funcionamiento de la sanidad Senegalesa, ha organizado la colaboración para realizar estas jornadas junto con un grupo de sanitarios Senegaleses, nuestra gratitud hacia ella es infinita.

Revisión de actuaciones: Como es costumbre el viaje sirve para revisar las actuaciones que se han realizado durante nuestra ausencia, para dar el visto bueno y renovar la confianza con los responsables de los sitios visitados, la confianza hay que ganársela demostrando que las inversiones hechas se cuidan para evitar que la dejadez las arruinen, por suerte y en general hay que decir que podemos valorar positivamente esta inspección, cosa que nos da mucha alegría y que también nos da la razón de seguir invirtiendo con criterios restrictivos y provocando la colaboración de las personas que se van a beneficiar de éstas inversiones.

Nuevas actuaciones: En África el trabajo nunca termina, la carencia de infraestructuras básicas es tan evidente que nunca consigues cerrar un tema, siempre hay una nueva necesidad, muchas veces sobrevenida por mil y unas circunstancias que escapan a nuestra razón occidental. Pero este es nuestro compromiso y así vamos a seguir.

En este viaje, hemos endurecido (si cabe) los criterios de asignación de fondos, con el ánimo de conseguir una rentabilidad mas alta si es posible a las donaciones, insistimos mucho en la colaboración de los beneficiarios y de las autoridades locales, no queremos ser unos meros repartidores de dinero, queremos entender las necesidades y que ellos entiendan el valor de estas donaciones.

Nos hemos reunido con 2 nuevas posibles becarias para el programa de formación de enfermeras, adquiriendo el compromiso del cabeza de familia de que los estudios no se van a truncar por motivos no académicos.

Vamos a reparar la ambulancia de Fongolimbi, esta parada y hay que cambiar el motor, de momento se ha desechado la posibilidad de adquirir un vehículo “nuevo”.

Vamos a cambiar las baterías del sistema fotovoltaico de Syllacounda.

Suministraremos medicamentos a Fongolimbí y Syllacounda

Estamos negociando el precio de una campaña de operación de cataratas en el hostpital de Kedougou con el doctor Sylla y el apoyo del Director del hospital.

Son muchas cosas, pero que todas las queremos hacer antes de terminar el verano.